Últimamente cuando camino por la calle, mirar al suelo se convierte en un ejercicio de aguante mental y psicológico. Me refiero a la de porquerías y suciedad que hay en tan solo un metro cuadrado de acera.
Hablemos de los elementos característicos que podemos encontrarnos en el suelo callejero:
1.- Las cacas perrunas: Excrementos, mierdas, desechos fecales, heces, mojones... Se trata de ir salteando los obstáculos como una carrera de fondo para no llevarte el regalito en el zapato. Siempre está la opción de comprar un cupón y un buen pañuelo para limpiar los restos.
2.- Gargajos: esputo, escupitajo, flema, salivajo, gallo, pollo... Aquí los tenemos diversos, desde los de color verdoso, pasando por los mas aguados, recién echados, con su espumilla incluida. Siento estar provocando fatiga, pero es que deberían cortar la lengua a todo el que escupiera al suelo. ¿Qué necesidad tengo de ver esa asquerosidad?.
3.- Chicles: polimero gomoso, goma de mascar, ... Soy la primera que me gusta comer un chicle, pero una vez masticado lo tiro a una papelera, no abandonandolo a su suerte para que caiga en el zapato de cualquiera y se acuerde del dueño del chicle y sus antepasados. Sólo hay que hechar un vistazo para ver cuantos chicles hay pegados en un metro cuadrado.
Esto son simples ejemplos de toda la mierda que podemos encontrar en nuestras calles. Hagamos un ejercicio de reflexión sobre lo guarros/as que somos.
2 comentarios:
que verdad que es y depende del sitio te puede encortar otras cosas mas raras jajajaja
si y dependiendo del lugar!!
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